miércoles, 12 de marzo de 2014

VÍDEO-CONVOCATORIA DEL ACTO DEL 28M: "UNA RESPUESTA COLECTIVA A LA REPRESIÓN"

Convocatoria: Coordinadora Paremos la Criminalización de la Protesta Social
Este vídeo convoca al acto público el viernes 28 de Marzo "Una respuesta colectiva a la represión", contra la criminalización de la protesta social.
Intervendrá una variada representación de activistas de la protesta social.
Viernes 28 de Marzo. 19,30 horas (7 y media de la tarde). Auditorio Marcelino Camacho (CC.OO.). C/Lope de Vega, 38. Madrid
)

Se irá actualizando información próximamente en soslibertades.wordpress.com, en libertadesdemocraticas.org y en las redes sociales de estos blogs, así como en los de las organizaciones ligadas a ellos. 

Puedes encontrarnos también twitter: https://twitter.com/SOSLibertades

Presenta el acto: el bloguero Shangay Lily


Intervendrán las siguientes personas y entidades/organizaciones:

  • Manuela Carmena (Magistrada jubilada)
  • Boti García (LGTB) 
  • Luis García Montero (poeta)
  • Alberto Torres (activista social. Coordinadora 25-S)
  • Heidi Sánchez (coautora del vídeo con Raúl Capín y periodista ciudadana)
  • Marciano Sánchez Bayle (Federación de Asoc. en Defensa de la Sanidad Pública)
  • Ángel García (Salvemos Telemadrid)
  • José Manuel Izquierdo (Bomberos de Madrid)
  • Iñaki Guevara (Unión de Actores)
  • Jaime Ruíz (memoria Histórica. AMESDE)
  • Begoña San José (Mujeres por la Igualdad)
  • Gabriel Tuesta (Inmigrantes. COIN)
  • Teresa Esteban (defensa de la enseñanza pública. STEM)
  • Juan Carlos Asenjo Asenjo (Comité de Empresa de Coca-Cola)

miércoles, 18 de septiembre de 2013

CRISIS, ESTADO CAPITALISTA Y EMPRESARIADO

Documento de análisis del grupo Iniciativa de Clase

Más allá de lo que los voceros del capital pretendan vendernos como buena nueva de un supuesto ciclo de recuperación económica –plagado de incertidumbres, riesgos y amenazas según los más inteligentes partidarios de este sistema de dominación económica-, lo cierto es que la clase trabajadora en los países centrales del capitalismo ha conocido muchas más derrotas que victorias en este período.

Son muchos los factores que explican estas derrotas. Entre ellas cabe citar el hundimiento del llamado socialismo real, que puso en jaque a la misma idea de progreso, la asunción por las izquierdas de la sociedad de mercado como horizonte político-económico, la adquisición por parte de casi todas las izquierdas y por la mayor parte del sindicalismo de un pensamiento, un discurso y una práctica ajenas a sus propios valores, la ideología individualista del ciudadano-consumidor como caballo de Troya de la idea de clase en tanto que proyecto colectivo, la incapacidad de crear una recuperación de los valores de una izquierda revolucionaria desde el alternativismo (profunda pero inconfesamente reformista) o la incompetencia teórico-práctica de los segmentos de la izquierda dogmática y sectaria.  Como elemento material y objetivo de la praxis política, el debilitamiento de los Estados al que han contribuido los distintos gobiernos liberales y conservadores, social-liberales y liberal-progresistas aprobando leyes que permitían su pérdida de control sobre la actividad económica, favoreciendo la desregulación del capitalismo internacional, no sólo del financiero sino también del comercio y la producción, y dando muerte al Estado del Bienestar.

Las palabras del recién proclamado Rey de Holanda, Guillermo Alejandro, en la apertura oficial del año parlamentario son premonitorias al respecto de ese agonizante Estado del Bienestar, al declarar en su discurso la sustitución del  “clásico estado de bienestar de la segunda mitad del siglo XX por una sociedad participativa” Y continua el monarca, afirmando que “cada holandés debe adaptarse a los cambios que se avecinan”… “El paso hacia una sociedad participativa es particularmente notable en la seguridad social y en los que necesiten cuidados de larga duración. Es precisamente en esos sectores donde el clásico Estado del bienestar de la segunda mitad del siglo XX ha producido sistemas que en su forma actual ni son sostenibles ni están adaptados a las expectativas de los ciudadanos”. Guillermo Alejandro, que hablaba por boca del gobierno de coalición holandés liberal-socialdemócrata, podría haber sido aún más crudo pero es suficientemente claro, al menos para quienes quieran entender lo que se avecina en todos los países centrales del capitalismo. Las reformas y recortes, que en Holanda, serán de 6.000 millones de euros más sobre lo ya recortado, no son medidas provisionales, más tarde reversibles, una vez superada la crisis capitalista. Son definitivas y se ahondarán hasta dualizar la sociedad entre poseedores y desposeídos, entre trabajador@s y parados, por un lado, y empresarios por otro. La crisis, lejos de amainar, dará lugar a un período de estancamiento, con crecimientos 0 o raquíticos, altas tasas de desempleo y pobreza. Esta crisis capitalista ha demostrado la compatibilidad, de momento, de beneficios empresariales y financieros junto con el empobrecimiento social. Ello se está logrando mediante el descenso de los costes salariales, las ayudas públicas a la empresa y a la banca y el descenso de la contribución de las grandes fortunas y las empresas al sostenimiento del Estado social.

Es llamativo que este anuncio se haya realizado en un país que ha sido uno de los primeros en impulsar el Estado social, tras los acuerdos de Bretton Woods, y de llevarlo hasta una extensión que jamás alcanzó en los países mediterráneos. Y es significativo que dos días después de su anuncio, Guillermo Alejandro visite España, donde sin duda transmitirá a Juan Carlos I y a parte de l@s polític@s español@s los dictados de las grandes corporaciones europeas sobre el fin de un modelo de Estado.

Como Dante en “La divina comedia”, podemos decir aquello de  “Oh vosotros los que entráis, abandonad toda esperanza” a las puertas del infierno del retorno al auténtico capitalismo, el liberal.

Mientras tanto, allá donde gobiernan, las “izquierdas reformistas”, admitan serlo o no, se hacen el harakiri, como último homenaje destructor de lo que un día contribuyeron a erigir haciendo que el edificio caiga y ellos sucumban con él. El resto de las izquierdas que no son cómplices sorprenden por su impotencia, irrelevancia e incompetencia para dirigir la protesta social hacia un enfrentamiento directo y claro con el Estado capitalista y especialmente con la clase a la que éste representa. No debe sorprendernos, en consecuencia, que la sociedad europea esté girando políticamente hacia el fascismo, que canaliza la rabia social hacia derroteros históricamente conocidos, o hacia el empresariado, como figura salvadora, según una encuesta encargada por la televisión nacional holandesa NOS.

Por si aún quedan dudas acerca de lo que representa la llamada sociedad participativa con la que el gobierno holandés pretende sustituir a su Estado del Bienestar, Guillermo Alejandro, y el gobierno redactor de su discurso, se las aclaran: “La gente quiere decidir por sí misma, organizar su vida y cuidar unos de otros”. Más claro, agua. Buscaos la vida, vagos, porque a partir de ahora vuestra supervivencia es sólo cosa vuestra. El Estado no está para sosteneros. Tan sólo para ayudar al mundo empresarial y al capitalismo a no sucumbir y a recuperarse. Esto es lo que están diciendo desde hace tiempo los Estados capitalistas y sus gobiernos de la clase, se autoproclamen del color que quieran, capitalista. Ha sido necesario que un rey obscena y descaradamente sincero lo diga para que algun@s más entiendan lo que está pasando.

Mientras tanto, ignorantes políticos, reaccionarios y fascio-liberales confesos o en proceso,  seguirán mirando al dedo (políticos) que señala a la luna (empresarios). Es el empresariado el auténtico poder que dicta las políticas que llevan a cabo los Estados capitalistas y sus gobiernos. Esta convergencia de intereses se da por el hecho de que el Estado, bajo el capitalismo, no es un espacio de poder neutro y supraclasista, que medie entre los intereses sociales divergentes y antagónicos de las clases sociales, sino un Estado de clase, de la clase capitalista.

En abril de 1917 escribía Lenin, parafraseando a otro autor: "Los puestos en los consejos de administración — escribe Jeidels — son confiados voluntariamente a personalidades de renombre, así como a antiguos funcionarios del Estado, los cuales pueden proporcionar no pocas facilidades (!!) en las relaciones con las autoridades. . . en el consejo de administración de un banco importante hallamos generalmente a un miembro del parlamento o del ayuntamiento de Berlín" (“El imperialismo, fase superior del capitalismo”. V.I. Ulianov). Pero muchos de los que hoy descubren, indignados, estos hechos pretenden dar la vuelta a los mismos y proclamar que la culpa es de esos políticos que ocupan dichos puestos en los Consejos de Administración de Bancos y grandes corporaciones, en lugar de admitir que sólo son los facilitadores de las órdenes  que dicta el capital. En España, el caso Bankia-Caja Madrid y los escandalosos sueldos de los representantes políticos en ella es ilustrativo del modo en que los capitalistas sabotearon un tipo de banca semipública (las cajas de ahorros) para destruirlas en beneficio de una banca privada que buscaba la concentración financiera y acabar con “el intrusismo” de unos competidores hasta entonces parcialmente regulados. Esa es la cuestión y no otra.

Si durante un tiempo fue posible el Estado del Bienestar es porque las izquierdas habían sido previamente fuertes y capaces de imponer un pacto social que sería su auténtica amanita faloides, al envenenarlas desmovilizándolas, para gestionar un Estado capitalista que no estaba al servicio de la clase trabajadora sino de la necesidad de un consumo industrial de masas que el Estado del Bienestar y el consumo a crédito hicieron posibles. Una vez cazada en esa trampa la clase trabajadora, debilitada su conciencia y su identidad y comprada la izquierda bajo el falso sueño, en realidad pesadilla, de la cogestión con el capital, la trampa se cerró. Cuando las tasas de beneficio del capital industrial y de los servicios empezaron a descender, como consecuencia de la saturación de la oferta y del creciente coste de amortización de los equipos productivos, derivados de una innovación tecnológica por encima de las necesidades reales, se abrió el paso hacia la desregulación de los capitales, el debilitamiento del pacto social y los inicios de la voladura del Estado del Bienestar con Thatcher, Reagan, los Chicago Boys y la escuela austriaca de economía. 
Hoy se completa esa fase y se cierra un período de la historia de los Estados centrales del capitalismo.   

A menudo se habla del capitalismo casi como un concepto abstracto, un tanto difuso y de fuerzas económicas casi opacas y desconocidas. No es cierto. El capitalismo está formado por empresas, fundamentalmente grandes y transnacionales, pero también pequeñas y medianas, como organizaciones integradas en un sistema económico y en unas relaciones sociales de producción concretas.  Cualquier asalariado/a que trabaje fuera de empresas de propiedad colectiva (cooperativas y otras formas similares) o de los restos no privatizados de los servicios públicos entenderá a qué nos referimos cuando hablamos de una empresa capitalista y de unas relaciones sociales de producción capitalistas. 

Desde hace mucho tiempo la empresa capitalista en los países centrales de este sistema económico no era un espacio de sumisión, temor, expectativas negativas, anomia, alienación, frustración y sobreexplotación del trabajador/a como lo es ahora.
Es el momento de reorientar la protesta social, extendiéndola desde la defensa de lo público, herido de muerte, hasta la actuación en un doble frente de lucha: contra el Estado de clase del capital y contra las propias empresas y elevando los objetivos políticos de dicha lucha más allá de la resistencia hacia la defensa de un nuevo sistema económico que destruya el capitalismo y abra paso a la emancipación de la clase trabajadora. Ello supone la lucha por un horizonte de sociedad socialista, que nada tiene que ver con los gobiernos de partidos autoproclamados socialistas.

Si desde el interior de la bestia, la empresa, la lucha se hace especialmente difícil por la represión empresarial que ello entraña, puede ser el momento de complementar la 
debilitada acción sindical con la lucha de fuera hacia dentro.

Cercar a la empresa capitalista mediante un ejercicio de señalamiento de la figura empresarial como el auténtico origen de dolor que sus gobiernos causan a nuestra clase, criminalizando y estigmatizando socialmente la figura de los empresarios, evidenciando las relaciones entre negocios y política de Estado, protestando ante las puertas de las grandes corporaciones, volviendo a hacer sindicalismo con el panfleto en la mano y la toma de contacto con la clase trabajadora a la salida de los centros de trabajo. Ese puede ser un camino a explorar que el ciudadanismo, la basura ideológica del “bien común” y el “capitalismo humano”, el interclasismo en la dirección de las luchas y las propuestas de maquillaje de las instituciones burguesas -listas abiertas, ILPs, referéndums, leyes de transparencia, procesos constituyentes y demás sucedáneos que no incorporan una movilización para derrotar al capitalismo y a la naturaleza de clase de sus Estados- tratan de evitar con un bucle recurrente de protesta destinado a impedir que la clase trabajadora ocupe el centro del escenario de las luchas. 


Eso o que el capitalismo se dé la alternativa a sí mismo a través del fascismo y de una derrota de histórica de nuestra clase de la que tardaremos muchas generaciones en recuperarnos. 

domingo, 5 de mayo de 2013

POSICIÓN DE INICIATIVA DE CLASE SOBRE EL MOMENTO POLÍTICO ACTUAL

El régimen monárquico y los dos principales partidos que lo sustentan, PP y PSOE, han entrado en una aguda crisis, derivada no sólo del impacto de la crisis del capitalista sobre todo el orden institucional que le da cobertura política sino del agotamiento de la tríada mencionada para ofrecer alternativas que den respuesta a las necesidades y problemas de la gran mayoría de la población española –la clase trabajadora- y de una corrupción que es, a su vez, síntoma y efecto de un proceso de descomposición en la estructura económica, política y social. 

La Monarquía de Juan Carlos I es heredera del franquismo, a través de la Ley de Sucesión en la Jefatura del Estado de 1947, que fue ratificada por las Cortes franquistas el 22 de Julio de 1969, ante las que el entonces príncipe prestaría juramento de guardar y hacer guardar las Leyes Fundamentales del Reino y los principios del Movimiento Nacional, es decir, el ideario franquista. 

En ningún momento posterior a la muerte del dictador Francisco Franco la monarquía española se sometió a un pronunciamiento sobre ésta por parte de l@s español@s. La ausencia de un referéndum Monarquía-República hace ilegítima de origen dicha institución.  

A la transición de la dictadura a una democracia monárquica vigilada y menor de edad, sin ruptura alguna con los poderes fácticos del régimen anterior (ejército, iglesia, fuerzas policiales, poderes económicos del franquismo,…), contribuyó la alianza sellada entre los sectores aperturistas del franquismo y los partidos mayoritarios de la izquierda, PSOE y PCE. Estos últimos hicieron tabla rasa y amnesia respecto a sus ya hipermoderadas propuestas realizadas en los últimos años del franquismo para la instauración de un régimen democrático en España, aceptando la monarquía, su bandera restaurada por un levantamiento militar contra el legítimo gobierno de la II República, la no depuración de las fuerzas armadas y la policía del momento, integramente franquista, el rechazo a un juicio al franquismo y a sus crímenes durante la dictadura, el pacto con las fuerzas económicas de la oligarquía que financió el levantamiento militar de 1936,… Podemos decir respecto a la situación política actual que de aquellos barros vienen estos lodos. 

Hoy, uno de esos partidos, el PSOE, es un zombi y el otro, el PCE, nunca volvió a recuperarse de su debacle de 1982, tras años de renuncias a su propia identidad y a sus tradiciones de lucha durante la dictadura. Es apenas las sombra de unas siglas prácticamente muertas. 

Sobre las consecuencias sociales de la crisis –6 millones de parados, recortes en todos los derechos sociales y servicios públicos, destrucción de tejido productivo de cientos de miles de empresas- se yergue la más aguda crisis de legitimidad vivida por el sistema político surgido en la transición política española. 

Juan Carlos de Borbón y la Familia Real están situados en el ojo del huracán de una enredada y extensa corrupción que puede llevarse por delante a la Monarquía española. La información que se va conociendo apunta con claridad al hecho de que la financiación ilegal realizada por Iñaki Urdangarín, su mujer, la Infanta Cristina y el socio del primero, Diego Torres sólo eran comisionistas en un negocio fraudulento cuyo primer beneficiario sería el propio Rey. 

El Partido Popular, cuestionado por los trabajadores y por amplísimos sectores de la sociedad por sus políticas de austeridad para los sectores más débiles, sus salvajes recortes sociales y la madre de todas las corrupciones de la trama Gürtel, consistente en el premio en metálico a sus dirigentes por conceder contratos de las administraciones dirigidas por el PP a empresas privadas y por sus políticas privatizadoras de los servicios públicos a otras empresas (sanidad, educación, dependencia,...), empieza a comportarse como un boxeador noqueado. La cruz de navajas interna en este partido se refleja ya hasta en los medios de comunicación más cercanos al mismo. 

El PSOE, que negó la existencia de la crisis hasta que le estalló con toda su fuerza en la cara, y que inició los recortes y las reformas antisociales, es hoy un partido roto, sin ideas ni proyecto político, muerto por el impacto de la crisis capitalista contra su programa social-liberal. Si se aplicara a este partido un osciloscopio médico veríamos una línea completamente plana, la línea de la muerte política. 

El derecho de autodeterminación de los pueblos fue en el proceso de la reforma política otro de los elementos negados que ahora se hace presente con toda su fuerza en Cataluña y en Euskadi. Como realidades que se empeñan en hacerse presentes en la historia no puede ser rechazada durante mucho más tiempo su voluntad. Desde la izquierda política cabe señalar la necesidad de dar respuesta a la exigencia del derecho a decidir y de los pueblos a ser. 

El triángulo sistema económico capitalista, cúspide simbólico-política del sistema (Monarquía) y base principal de representación del mismo (PP y PSOE) hacen agua por los tres lados. 

Estamos ante la tormenta perfecta para una revolución social que realmente desee transformar la realidad y no limitarse a maquillarla. Es cierto que el factor subjetivo de la conciencia y de la organización política de dicha conciencia fallan estrepitosamente, siendo estos problemas no menores. Dichas deficiencias en la conciencia y organización de la clase trabajadora son responsabilidad de las izquierdas, que hace demasiado tiempo abandonaron la lucha ideológica para sustituirla por una línea política que sólo ha servido para desclasar a l@s trabajador@s. 

En ese contexto se entiende el porqué y el alcance de las propuestas de “proceso constituyente”, de crear una Syriza a la española, en sus versiones 1 (IU) y 2 (sectores desgajados del PSOE), de los 25-S, de las Mareas Ciudadanas que conmemoraron el 23-F, de los discursos de reformismo meramente institucional respecto a la “democracia participativa” y del ciudadanismo interclasista de todo este territorio político al que ha incorporado recientemente el reformismo sindical de CCOO y UGT a sus mensajes, como colofón de su ya larga experiencia de abandono de las posiciones de clase en defensa de l@s trabajador@s. 

No debe sorprender, dentro de este nuevo marco cambiante, la respetabilidad y el eco que están encontrando entre los “mass media” del sistema capitalista opciones como IU y EQUO –siguiendo la estela de lo sucedido con la socialdemocrática Syriza griega- y UPyD , como potenciales recambios por la izquierda y por la derecha en un escenario de agotamiento de los partidos tradicionales de dicho sistema. 

Por si hubiera dudas acerca del “proceso constituyente” y de ruptura con el capitalismo, la estrella política ascendente de IU, Alberto Garzón las aclara cuando afirma que dicho “proceso constituyente” implica “una regeneración democrática, un nuevo modelo de país, un nuevo modelo de Estado y tener una democracia más participativa”. Del sistema económico alternativo, al que se niega a dar nombre y apellidos, nada tiene que decir. Separa su crítica al capitalismo de dicho “proceso”, situándolo en otro “negociado” distinto. 

Esta trampa de desligar “proceso constituyente” de clarificación ideológica respecto a un proyecto de sistema económico concreto evidencia los límites de la propuesta que nos ofrece el nuevo reformismo de IU. Éste está flanqueado por un republicanismo oportunista, para el que lo que no sea sólo República es secundario o no está en su agenda, así como por la gran mayoría de las organizaciones pseudoradicales a su izquierda pero con similar aceptación del futuro marco previsto, ideado por el conjunto mencionado y por el ciudadanismo interclasista y todoterreno en lo político que repudian a las posiciones de clase y que pretenden dejar a la clase trabajadora a la espera de otra nueva y eternamente pospuesta ocasión para ver reflejados sus intereses y aspiraciones. 

Ya vivimos una transición en la que sus actores políticos pactaron con las fuerzas económicas del capital su contenido, que traicionó tanto a la clase trabajadora, como a una auténtica ruptura política y a la posibilidad de un sistema económico asentado sobre un modelo distinto al del capital, el cuál fue el promotor y baluarte del régimen político instaurado a partir de la sublevación del 18 de Julio de 1836. 

Iniciativa de Clase no va a avalar una reforma, vestida de falsa ruptura constituyente, en la que el gatopardiano cambio consista en la sustitución de un Rey por un Presidente de República y de un régimen de partidos por otro nuevo. Queremos una República, por supuesto, pero la nuestra es la de trabajadores. 

Queremos un nuevo régimen de partidos pero no uno que nos vuelva a reeditar el timo del tocomocho del maquillaje institucional que no plantea la cuestión, para nosotros central, el de la propiedad de los medios de producción y distribución. La actual crisis capitalista ha hecho del debate propiedad privada-propiedad social de los medios de producción el asunto central, por más que las falsas izquierdas sistémicas pretendan echarlo a escobazos del escenario. Es crucial para ella, y para el nuevo pacto social con el capital que se está fraguando como consecuencia de la descomposición del sistema político y económico actuales, silenciar esta cuestión. 

No somos maximalistas ni insensibles. No ignoramos que es un avance político el paso a una república, aun siendo burguesa, ni desconocemos las esperanzas de cambio de millones de trabajadores en este nuevo reformismo. Comprendemos su necesidad casi vital de agarrarse a una esperanza. Pero la Historia nos ha dado suficientes ocasiones de comprobar que cuando, en un momento de crisis y descomposición general del sistema (político, económico, social,...), la supuesta “revolución” frente al mismo deja la cuestión de la propiedad de los medios de producción al margen y de la definición clara y sin ambages del sistema económico que se propone, estamos ante una nueva traición a los trabajadores mancomunada por los reformistas y el capital. Y combatiremos frontalmente esa traición. 

En consecuencia, los puntos programáticos, a través de los que Iniciativa de Clase desea dar a conocer de modo claro y sin ambigüedades calculadas su posición, son los siguientes: 

1.- Dimisión del Gobierno Rajoy y convocatoria de elecciones generales ya. 

2.-Candidatura de un frente unido de las izquierdas, apoyado desde fuera por el conjunto del movimiento sindical, con el objetivo de abrir paso a una dinámica de ruptura tanto con la Monarquía y su Constitución como con el sistema capitalista. 

3.-Programa político de ese frente unido de las izquierdas en el que se plasme de un modo inequívoco su intención abrir paso a una República democrática de trabajadores y a un sistema económico socialista basado en el control de la producción por l@s trabajador@s en las empresas. La primera decisión de un gobierno de dicho frente debiera ser la incautación de todas las grandes empresas responsables de la crisis capitalista y en las que se han producido despidos colectivos y EREs sin justificación a pesar de tener beneficios. Junto a ello es imprescindible platear en el campo español una revolución agraria con expropiación de los grandes latifundios sin indemnización y control de los mismos por parte de l@s trabajador@s del campo.

sábado, 20 de abril de 2013

VÍDEO: CON L@S TRABAJADOR@S. POR LAS LIBERTADES

Vídeo de la Plataforma en Defensa de las Libertades Democráticas (PDLD)
  También en Vimeo:
Con l@s trabajador@s. Por las libertades from PDLD on Vimeo.

jueves, 18 de abril de 2013

EXPROPIAR VIVIENDAS BANCARIAS ES SÓLO EL PRINCIPIO DEL CAMINO


Comunicado de Iniciativa de Clase

La decisión de la Junta de Andalucía de expropiar viviendas a los bancos,  si los desahuciados por los mismos corren riesgo de exclusión social, y que les obliga a ofrecer viviendas en régimen de alquiler, si no quieren ser penalizados por no hacerlo con una multa de 9.000 euros, es progresista y necesaria aunque no suficiente.

Es una medida positiva en medio de la falta de respuestas institucionales por parte del Gobierno central del PP y del resto de Comunidades Autónomas. Lo es porque por primera vez pone las necesidades y los derechos sociales y humanos por delante de los principios de beneficio y de propiedad y lo es también porque es el primer desafío después de todos estos años de desahucio de las familias de clase trabajadora frente a la dictadura del capital.

Pero no deja de ser una medida tímida por cuanto que la expropiación de las viviendas a los bancos será temporal –no definitiva-, tendrá un límite de 3 años, ofrecerá a las entidades financieras un 2% de justiprecio por incautación temporal de la vivienda (cuando no tendría que dar ni un €), está prevista sólo para desahuciados (sin tener en cuenta a familias que, no siendo desahuciadas, no pueden acceder al alquiler por su alto precio) y se aplicará en los casos en los que el esfuerzo para atender la hipoteca se haya multiplicado al menos por 1,5 y suponga más de un tercio de los ingresos familiares.

Por otro lado, la medida no contempla la penalización a los particulares con más de una vivienda, que se niegan a alquilarla, ni de los promotores de vivienda, que han dejado miles de casas desocupadas ante su no venta.

A pesar de todo, desde Iniciativa de Clase consideramos que desde la Junta de Andalucía, que hasta el momento no se había caracterizado por una especial sensibilidad social hacia la dramática situación de amplísimos sectores de la clase trabajadora (recortes sociales en sanidad, educación y otros ámbitos, planes de austeridad hacia empleados públicos y funcionarios, desinversión en sectores claves,…), se ha abierto una nueva pauta de actuación desde lo institucional inédita hasta el momento que no dudamos en saludar y animar en su continuación y profundización.

Creemos que la virtualidad de esta medida radica no sólo en que da una respuesta, al menos parcial, a las demandas de los colectivos y plataformas de afectados por la hipoteca sino también en que rompe con la dinámica de actuación de la derecha reaccionaria del PP en los niveles central y autonómico.

En contexto de intento de criminalizar a los movimientos de afectados por la hipoteca por parte del PP y su Brunete mediática, con la anuencia de antiguos dirigentes del PSOE como Felipe González o José María Maravall, la decisión de la Junta de Andalucía libera presión sobre dicho movimiento y teje alianzas entre iniciativas institucionales, por reformistas que éstas sean, y la lucha social.

Si el gobierno de coalición reformista PSOE-IU mantiene y lleva adelante, con todas sus consecuencias, este conjunto de medidas y resiste cualquier presión, bajo coartada legal, jurídica o de intervención en sus competencias autonómicas de la derecha política y económica, nos encontrará, en el caso de esta medida específica, crítica pero lealmente a su lado. Pero para ello deberá estar dispuesto a desafiar cualquier intento del Gobierno del PP de echar abajo su decisión, manifestando su insumisión ante dichas presiones y llamando a la movilización popular en la defensa del decreto-ley, del mismo modo que se hizo cuando se intentó burlar en su día el acceso de Andalucía a su autonomía.  De lo contrario, si la Junta de Andalucía claudicara ante posibles presiones del Gobierno del PP, encontrará en Iniciativa de Clase el más claro enfrentamiento contra un comportamiento cobarde y pusilánime y contra lo que quedaría como un acto de mero oportunismo electoralista.

En otro orden de cosas, Iniciativa de Clase manifiesta su apoyo decidido a la estrategia de escraches seguida por la PAH, por considerarla un acto necesario de visibilización del drama de los desahucios y de señalamiento de las responsabilidades de cada representante político del partido del Gobierno, el PP. Este apoyo de Iniciativa de Clase a la PAH no es un cheque en blanco a la misma ya que consideramos que su propuesta de dación en pago, además de poner por encima del derecho humano a la vivienda el supuesto de los bancos al cobro de la deuda y al principio de la propiedad sobre lo colectivo, no resuelve el hecho de que aunque las familias desahuciadas pudieran liberarse de la deuda pendiente acabarían en la calle, al perder su vivienda.

martes, 26 de febrero de 2013

DIEZ MIEMBROS DE LA PEÑA BUKANEROS DETENIDOS Y DOS LLAMADOS A DECLARAR


El Gobierno del PP aplica la represión como única política para tratar de frenar la lucha contra los ajustes y recortes sociales...

¡¡ALTO A LA REPRESIÓN!!
¡¡CIFUENTES DIMISIÓN!!


CIFUENTES CRIMINALIZA A LOS BUKANEROS

DIEZ DETENIDOS Y DOS LLAMADOS A DECLARAR

Después de la detención en el día de ayer de un Bukanero en su centro de trabajo, la policía ha seguido realizando detenciones. A estas horas hay DIEZ DETENIDOS Y DOS MÁS QUE HAN SIDO LLAMADOS A DECLARAR. 

Os pedimos que permanecais atentos a las informaciones que vayamos sacando. Adjuntamos el comunicado oficial que en el día de ayer sacó BUKANEROS cuando sólo había sido denido un miembro de la peña del Rayo Vallecano.

¡¡ALTO A LA REPRESIÓN!! 
¡¡NO A LA CRIMINILACIÓN DE BUKANEROS!!
¡¡CIFUENTES DIMISIÓN!!

http://www.bukaneros.org/?p=3230